La temporada 1955-56 resultó numéricamente desastrosa para el América, sin embargo sobresalió notablemente la presencia de la máxima leyenda del balompié mexicano: Horacio Casarín, que no solo fue el mayor goleador del equipo con 13 anotaciones, camiseta del real madrid sino que también ejerció como líder del plantel. Como ganador de esta jugó la Copa de Honor Cousenier contra Peñarol. En un principio se pensó en la camiseta del Club Estudiantes de La Plata de Argentina, pero debido a que los allegados de Estudiantil sentían admiración por el Club Atlético Boca Juniors (también argentino), finalmente se optó por el uniforme de dicho club.