Si bien desde mediados de siglo algunos clubes promovieron que las mujeres participaran en actividades deportivas y concurrieran a los estadios a presenciar encuentros de fútbol, fue a partir de la Copa Mundial de Fútbol de 1978, jugada en Argentina, que las mujeres comenzaron a involucrarse con el juego, aunque principalmente como espectadoras, ya que la práctica recreativa es marginal y se encuentra excluida de las escuelas. Sus mayores logros deportivos los obtuvo en los años 1973 y 1984 cuando se consagró campeón mundial en la Copa Intercontinental, derrotando a los representantes de la Copa de Campeones de Europa: la Juventus de Italia y el Liverpool de Inglaterra respectivamente.